Si pensamos en algo típico de Madrid nos salen cosas como el oso y el madroño, la puerta del sol, el bocata de calamares, el Manzanares (arroyo aprendiz de río), el chotis, las gallinejas, las barcas del Retiro, la Gran Vía de Amancio Ortega, el cheli o el chocolate con churros. Pero sin duda no hay nada que más identifique Madrid y que más orgullosos puede tener a los madrileños que el Rastro.
Todos los domingos por la mañana, initerrumpidamente (llueva, nieve, haga un sol de justicia o caigan ranas del cielo) desde antes de que Colón se confundiese y llegase a América, la Ribera de Curtidores y alrededores se llena de puestos de todo lo vendible e invendible (antigüedades, baratijas, libros, colecciones, ropa, complementos, ropa, más ropa…) y la gente se acina como práctica para el metro en hora punta de la mañana siguiente.
Una pequeña muestra de lo que es el Rastro, para los de fuera de «aquí de Madriz».
P.S.: Una buena web bien completita sobre el Rastro de Madrid, por si gustas echarle un vistazo: www.elrastro.org